martes, 24 de mayo de 2011

¿POR QUÉ ÁNGEL DE LOS POBRES?


Pablo Emilio Escobar Gaviria, nace en Rionegro, Antioquia un primero de Diciembre de 1949. Desde niño fue un hombre trabajador debido a la ocupación de sus padres; su padre era un campesino, proveniente de la vereda El Tablazo (A pocos minutos de Medellín) y su madre, Herminta Gaviria una profesora de una escuela rural. Pablo decidió orientarse más hacia el lado paterno, comenzó criando vacas al lado de su padre Abel Escobar en las fincas situadas alrededor del municipio de Rionegro. Luego esta actividad era solo un pasatiempo para Escobar, por lo que decide crear su propio negocio y para esto instala un pequeño local comercial en donde alquilaba películas y bicicletas. Prontamente se adentra en el mundo negro de su municipio natal, empieza a robarse las lapidas del cementerio central del pueblo, para regrabarlas y venderlas de nuevo al público. Después decide bajarse a la ciudad de Medellín, que queda aproximadamente 35 minutos de Rionegro, con esta acción de Pablo es posible ver sus ganas de salir adelante e ir en busca de una nueva vida. Pablo estaba muy atraído por la política, sus ideas eran bastante revolucionarias en comparación al gobierno de Cesar Gaviria Trujillo, quien gobernaba durante el periodo 1990-1994. Él decide que quiere formar una gran oposición, para esto estaba muy clara la necesidad de tener a la clase popular de su lado. Alrededor de 1976 Pablo comienza oficialmente su carrera política;

[1]“Levantó un barrio para desheredados en Medellín, llamado Medellín sin Tugurios o el barrio de Pablo Escobar, un gueto de 780 viviendas unifamiliares, que construyó con destino a la gente necesitada para obtener los votos que le convirtieron primero en teniente de alcalde del Ayuntamiento de Medellín y, después, como candidato del Movimiento de Renovación Liberal, en diputado suplente del Congreso de la República en 1982.”

Es evidente la forma tan paciente con que Pablo seduce a sus votantes, Medellín pasaba una época de crisis no solo política sino también social, algo que Escobar uso a su favor. Lo que el gobierno opositor se empezó a preguntar, es de dónde salía el dinero usado para promover estas campañas, para construir y arreglar barrios en la zona norte de Medellín;

[2] Los barrios bajos de su ciudad, comenzaron a tener mejor aspecto gracias a la obra de Escobar y, como buen fanático del fútbol que era, construyó varias canchas en la zona.”

Pablo Escobar empieza a ser una persona muy querida por los estratos más bajos de la ciudad, comenzó a ganarse la confianza de toda esta gente; lo que lo hacía más poderoso políticamente. Para los desposeídos, Pablo era una clara salida de la pobreza, aquella que azotaba a Colombia en su época. Escobar aparte de ser una persona muy poderosa, era muy inteligente lo que le ayudaba a no ser engañado en ningún momento y poder planear todos sus actos él mismo. Aprovechándose al mismo tiempo de la necesidad de algunos para que trabajaran para él a un muy bajo precio y sin temor alguno a las consecuencias porque estarían trabajando para “El Capo”. El dinero era lo único que estas personas buscaban, al ver que el nombre de “Pablo Emilio Escobar Gaviria” sonaba por todos los medios, quien no quería estar de su lado y además salir favorecido económicamente. Es tal la pobreza que para esta gente de estratos bajos Dios parece no importarles, porque según ellos el no les colabora por más que recen hasta el cansancio por lo que Pablo se vuelve su “Dios” simbólico y aquel que los sacara de la pobreza. En el fragmento a continuación podemos apreciar cómo les cambia la forma de pensar desde niños en cuanto a la religión, en este caso es Jhon Jairo Velásquez Vásquez, alias “Popeye” quien años más tarde se convertiría en la mano derecha de Pablo Escobar;

[4]“Robo fruslerías en los almacenes y en mi casa. Nada me importa. Al fin y al cabo Dios no me ayuda, por más que rece el rosario y repita las oraciones aprendidas. No me ayuda.”

Este tipo de situaciones que nos muestra Astrid Legarda acerca de la infancia de alias “Popeye” da a conocer los vicios a los que se empiezan a dedicar los niños de las comunas, ven el mal como un bien y como su única forma de ingresos porque a un trabajo aun no tienen acceso. En las comunas el dinero lo es prácticamente todo, por él es que viven, la diferencia entre cada quien es como lo consiguen. De eso es de lo que Pablo toma ventaja, lo que él necesita son trabajadores, les paga sumas inimaginables para ellos, pero que a la vez no significan ni la más mínima parte de la fortuna del señor Escobar.
La siguiente crisis que afecta a alias “Popeye” durante su época de joven de comuna es el desempleo, dura un año en esas condiciones, pero exactamente ese tipo de situaciones por las que pasaban las personas era a las que Pablo les sacaba provecho, teniendo en cuenta el poder que el tenia por su fama y fortuna. “Popeye” y sus amigos se encontraban un día “vagando” en su barrio y parecían ser el tipo de hombres perfectos para el perfil de trabajador de Pablo, por lo que les ofrecen un empleo, sus amigos rechazan la oferta mientras que el sin dudarlo aceptó el trabajo sin saber cómo le cambiaria la vida después de aceptar el trabajo;

[5]“Una tarde sentado en la esquina de mi casa, junto con mis amigos Hugo Franco y Juan Diego Morales, hermano de Ángela María, llega mi dramático destino disfrazado de oportunidad de empleo. Un conocido nos ofrece, a los tres, el trabajo de chofer y guardaespaldas de una bella mujer. Estamos en la calle tomándonos una cerveza y escuchando tangos. Hugo, hijo de un médico, lo rechaza de plano y se ofende. Juan Diego, hijo de un pensionado hace lo mismo. Yo acepto de inmediato. Tomo mi empleo con responsabilidad y entusiasmo.”

Se ven las ganas de salir adelante de Jhon Jairo, un joven igual a muchos en su barrio, el cual acepta el trabajo quizá sabiendo en que se está metiendo. De pronto un sueño para muchos, trabajar con la mafia, piensan que es solo dinero y mujeres. Como no se iba a sentir importante y contento, después de pasar por la delincuencia ya que según el “Dios no lo escucha” y se le presenta este empleo y más que nada significa trabajar con el capo de capos en Colombia y en el mundo. Como este joven con poco estudio y poco enfoque en sus valores no idolatraría a Pablo, quien estaba en la meca de su fama, tenía el poder que quisiese, y podía pagar lo que fuera por lo que sea, en este caso un empleado mas y alguien que ahora podría mantener a su familia y salir adelante.

Apartándonos un poco más del caso de John Jairo Velásquez, es posible ver lo sensibles que son las personas de estratos bajos y como se dejan seducir por tentadoras ofertas que al fin y al cabo no los llevaran por ningún buen camino. A pesar de que estas personas, en su mayoría jóvenes desorientados, sin trabajo y que no tienen nada que hacer durante el día saben que esos trabajos con capos y con la mafia los llevara lentamente a la muerte. Viven la vida al máximo, rodeados de armas, droga y corrupción pero sienten que es para lo que nacieron y prefieren vivir rápido a tener una vida normal. Ven a los capos de capos, en este caso a Pablo Escobar como una imagen a seguir, como si Pablo en verdad quisiera cambiar el mundo para bien, por eso lo sigue y le brindan su apoyo a muerte.


[4] “EL VERDADERO PABLO: Sangre, Traición y Muerte…” Astrid Legarda. Ediciones Dipon, Año 2005. Página 20, Párrafo 2, Línea 25.
[5] “EL VERDADERO PABLO: Sangre, Traición y Muerte…” Astrid Legarda. Ediciones Dipon, Año 2005. Página 25, Párrafo 2, Línea 2.

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